viernes, abril 24, 2009

CONTAMINACIÓN, SALUD Y MINERIA




CONTAMINACION, SALUD Y MINERÍA

EN PERÚ Y CAJAMARCA

P. Marco Arana Zegarra

MINERÍA, CONTAMINACION Y PROBLEMÁTICA DE SALUD GLOBAL

Con ocasión del año internacional de las montañas (2002) la FAO constataba que: “Con el crecimiento de la economía mundial y de la demanda de metales y minerales, las empresas mineras buscan más que nunca los ricos depósitos de las montañas… (y que en este contexto) América Latina es actualmente el objetivo principal de las empresas mineras internacionales, y las inversiones mundiales en materia de exploración en esta región abarcan el 29 por ciento. La apertura del sector de la minería a empresas extranjeras durante el decenio de 1990, la relativa estabilidad política alcanzada, las abundantes reservas y las grandes extensiones de tierra inexploradas han convertido a muchas zonas altas y montañosas de los países latinoamericanos en objeto de gran interés.”

Sin embargo, la FAO también llamaba la atención sobre el hecho que: “La minería y el tratamiento de los minerales y los metales pueden producir desastrosas consecuencias ambientales tanto en las zonas montañosas como en las tierras bajas. Es más, como los ecosistemas montañosos son tan frágiles, su degradación puede ser difícil y a menudo imposible de corregir. Los aspectos más graves de la degradación ambiental debida a la minería son: los daños a la calidad y disponibilidad del agua; la pérdida de biodiversidad y de cubierta vegetal, y las consecuencias que la contaminación produce en la atmósfera, así como el calentamiento del planeta… (y que) La minería a menudo es un trabajo peligroso. La salud y la seguridad de los mineros y de sus comunidades de las montañas corren peligro a causa de diversos factores, desde la inhalación de humo y polvo hasta la contaminación del agua y la falta de medidas de seguridad adecuadas durante sus labores.”[1]

La contaminación provocada por actividades mineras a nivel mundial ha sido también señalada por el Informe sobre el Estado del Mundo del Instituto World Watch del año 2004: La minería consume el 10 % de la energía mundial (4,900 a 6600 terawats/hora) y es responsable del 40 % de las emisiones de gases tóxicos a la atmósfera (142 millones de toneladas de dióxido de sulfuro/año”. Según el Mineral Policy Center, a nivel mundial, son 40 los mineros que mueren diariamente en sus sitios de trabajo.[2]

Diversos estudios reconocen que: “La minería, pese a que nos da gran parte de nuestro sustento diario, también es una de las actividades más contaminantes y perjudiciales para el medio ambiente y el hombre. A lo largo de la historia, ha ocasionado grandes perturbaciones en diversas partes del mundo, con graves problemas ambientales en forma directa e indirecta”.[3]

Un tema poco estudiado pero que merecería mayor atención es el relacionado con la contaminación minera y las poblaciones pobres donde frecuentemente se ubican los proyectos mineros, ya que los pobres se hallan expuestos a un mayor nivel de riesgo y mayor vulnerabilidad para su salud y seguridad, sea por la falta de acceso a información o por que están más dispuestos a tolerar los impactos ambientales negativos de las actividades mineras a cambio de que perciban algún beneficio económico de las mismas. Según los estudios del PNUD y la Universidad de Harvard a nivel mundial, se ha establecido que en las sociedades pobres la denominada “carga de la enfermedad” causante de muertes debido a problemas ambientales llega a ser del 20% lo que representa la muerte de 5 millones de personas al año, la mayoría de las cuales son mujeres y niños (3 millones relacionadas con problemas de acceso y calidad de agua y 2 millones relacionadas con el humo de las cocinas). Estas cifras de muertes causadas por contaminación en poblaciones pobres equivalen al total de las muertes causadas por la desnutrición en el mundo.[4]

MINERIA, CONTAMINACION Y SALUD EN PERU

En América Latina, diversos estudios han señalado los riesgos que representan las actividades mineras para la salud de las poblaciones pobres de su entorno: “La contaminación del agua y su calidad, el control de los residuos, el ruido, el polvo y la alteración de la tierra, son problemas que pueden afectar adversamente la salud y los medios de vida de los pobres y otros grupos vulnerables, que tienen poca capacidad de traslado ni medios para aliviar los efectos negativos.”[5]

Según De Echave, las actividades mineras en el Perú se ubican: 11.80% en poblaciones de extrema pobreza; 40.20% en poblaciones muy pobres y 36.40% en poblaciones pobres.[6] Estas poblaciones no solo se hallan en situación de mayor vulnerabilidad a su salud, sino también de mayor vulnerabilidad en el deterioro de su medio ambiente por prácticas intensivas de manejo de suelos, deforestación, así como por efecto de la expansión de las actividades mineras en sus territorios y con muy escasas posibilidades de acceso a la justicia.

A nivel nacional, cada vez son más las comunidades campesinas e indígenas y organizaciones de la sociedad civil las que han venido denunciando la grave afectación ambiental de las actividades mineras sobre la calidad y disponibilidad ambientalmente segura de los suelos, aguas y aires. Existe abundante información oficial que muestra la magnitud de estos daños ambientales en el sur, centro y norte del país, así como de la afectación de estos daños para la salud de poblaciones enteras como ha ocurrido en La Oroya, el Callao y Choropampa en Cajamarca. En los dos primeros casos, la intoxicación crónica con plomo de las poblaciones es ampliamente conocida y ha sido motivo de múltiples denuncias y de exigencias ciudadanas para una acción más eficaz del Estado. Ha sido el propio relator especial de la NN.UU. el que incorporó la recomendación Nº 58 en su informe de visita del año 2004.[7]

Para el Estado, la situación de contaminación de recursos hídricos, principalmente por actividades mineras, no es desconocida para las principales autoridades del país. Un informe de la Dirección General de Salud (DIGESA), hecho público por el Instituto Nacional de Estadística el año 2004, mostró que los recursos hídricos de los ríos Santa en Ancash, Chillón y Rímac en Lima, San Juan en Cerro de Pasco, Mantaro a lo largo de su recorrido por Pasco, Junín y Huancavelica se hallaban en situación de riesgo elevado (RE) por presencia de metales pesados y de sustancias químicas provenientes de diversas industrias, pero principalmente de unidades mineras.[8]





También fue hecho de conocimiento público por la autoridad de Saneamiento Básico de DIGESA que 16 de los 53 ríos de la costa están contaminados por los relaves mineros y vertederos de poblaciones adyacentes.[9] El problema, entonces no es tanto la falta de conocimiento o de información de la autoridad, sino la falta de capacidad del Estado para actuar sancionando a los responsables de la contaminación o mitigando los daños ambientales que constituyen un peligro para la salud de las poblaciones afectadas.

MINERIA Y SALUD EN CAJAMARCA

En los nuevos proyectos mineros de tajo abierto como Yanacocha en Cajamarca, las denuncias de las comunidades están relacionadas de manera directa con la contaminación y la disminución de los flujos de agua lo que está dando origen a diversos conflictos sobre todo en los últimos años, y en el caso de las comunidades aledañas a las zonas de operaciones también con el deterioro de la calidad del aire debido a las nubes de polvo.

Los factores ambientales disturbados por actividades mineras que tienen relación directa con daños a la salud de las poblaciones del entorno son: la contaminación de las aguas con metales pesados o alteraciones de el pH de las mismas, así como la falta de volúmenes adecuados de agua potable debido a la desaparición de la fuentes naturales de agua o alteración de los causes de ríos y quebradas. De no menor importancia es el deterioro de la calidad del aire fruto del incremento del parque automotor, la quema de millones de galones de combustible en la zona de operaciones mineras (3 millones de galones mensuales), uso de nitrato de amonio (anfo) para las labores de minado y las nubes de polvo provenientes de la zona de actividades mineras ubicadas a solo 14 kms. de la ciudad de Cajamarca.

Técnicamente se considera que la enfermedad ambiental es producida por la exposición a agentes contaminantes presentes en el ambiente y que, a diferencia de lo que sucede con otras enfermedades, en ésta no existe primariamente predisposición genética del individuo. La “enfermedad ambiental” se restringe a enfermedades no infecciosas causadas, en su mayoría, por la exposición a sustancias presentes en el ambiente. Así, la enfermedad ambiental resulta en una categoría importante de patología referida a una colectividad como resultado de exposición a determinados contaminantes ubicuos en el medio. La contaminación ambiental es definida como “todo cambio indeseable causado por el hombre en las características del aire, agua o suelo que afectan negativamente a los seres vivientes y en general al ecosistema”.[10]

En el estudio de Ramírez y León (2004) se presenta información de la evolución de las denominadas enfermedades ambientales en Cajamarca (respiratorias, oculares y cutáneas) para el periodo 1996-2001. Las variables estudiadas han sido crecimiento de población, parque automotor, consumo de energía, aumento de producción minera, lechera y ganadera. Concomitantemente, se verificó en el Hospital Regional de Cajamarca, del Ministerio de Salud, la variación de las enfermedades que pueden atribuirse a la contaminación del medio ambiente, principalmente. No se investigaron enfermedades degenerativas o mutagénicas que, en el largo plazo, también han sido atribuidas a contaminación ambiental.

Lo que el mencionado estudio muestra es que hay un incremento sostenido de las enfermedades ambientales a lo largo del periodo 1996-2001 (las actividades mineras se iniciaron el año 1993). La siguiente tabla muestra que las dermatitis aumentaron de 802 a 2,309; las respiratorias pasaron de 962 a 3,411; y las irritativas oculares de 11 a 310. Es decir, en ese lapso, las dermatitis se incrementaron 3 veces, las respiratorias 3.5 veces y las conjuntivitis en mucho mayor cantidad, aún cuando su incidencia relativa en el universo estudiado fue pequeña.

Tabla 3.- Total enfermedades ambientales por año.

Año

Total dermatitis

Total respiratorias

Conjuntivitis

Total

1996

1997

1998

1999

2000

2001

802

1 527

1 589

1 695

1 600

2 309

962

1 414

2 399

3 479

3 185

3 411

11

22

95

112

221

310

1 775

2 963

4 083

5 286

5 006

6 030

Fuente: Departamento de Archivo y Estadística Hospital Regional de la ciudad estudiada. Ministerio de Salud, Perú 2002.

Si bien el estudio llama también la atención sobre la correlación entre el crecimiento de la producción de leche y no solo de la actividad minera y las enfermedades ambientales, lo cierto es que el crecimiento de este tipo de enfermedades ha sido exponencial y está siendo también parte de los problemas que la población plantea como parte de la agenda pendiente que alimenta el clima de conflictos en la región.




Propuestas de Política y de Instrumentos de Salud Ambiental en Zonas Mineras:

  1. Consideramos que dado el alto nivel de riesgo que entrañan las actividades mineras para las poblaciones de su entorno sería preciso que la política ambiental incluyera la consideración de las zonas mineras como “sitios potencialmente peligrosos para la salud” tal como lo han propuesto investigadores de salud pública en México. [11] Esta consideración traería consigo que el Estado proporcione un tratamiento especial en materia de salud a las zonas de influencia minera. Para lo cual, en la elaboración de los EIAs debiera incluirse un estudio de los riesgos de salud que el proyecto traerá para las poblaciones del área de influencia directa e indirecta. Se tiene referencias que en algunos países como Canadá o la Columbia Británica ya los estados exigen la realización de estos estudios de riesgos de salud.

  1. Igualmente, en la fiscalización ambiental de las actividades mineras, que debiera ser hecha por una autoridad ambiental autónoma, debiera incluirse el monitoreo de las denominadas enfermedades ambientales (respiratorias, oculares y cutáneas) así como, de encontrarse indicadores de presencia de metales pesados en el agua y desaparición de fuentes naturales de agua, la autoridad debiera poder disponer la realización de auditorías de salud ambiental de las poblaciones del área de influencia minera de manera permanente. Para gran minería, las evaluaciones ambientales deberían ser anuales e incluir un componente de evaluación de los riesgos e impactos en la salud de las poblaciones del área de influencia del proyecto.

  1. Igualmente, teniendo como referencia la afección de la salud de las poblaciones de San Juan, Choropampa y Magdalena por el derrame de mercurio, es claro que se precisa preventivamente que las empresas mineras desarrollen planes de contingencia para desastres ambientales que sean conocidos para la población, debiéndose capacitar a la población en las formas de respuesta frente a este tipo de desastres. Las poblaciones denominadas “mineras” por las cuales circulan frecuentemente grandes cantidades de sustancias tóxicas debieran ser instruidas en las formas de respuesta a este tipo de emergencias.

  1. De otro lado, se precisa que se derogue el mecanismos jurídico por el cual, si una población que es afectada quiere presentar una denuncia por delito ecológico, actualmente se requiere que el Ministerio de Energía y Minas califique primero el daño. Esta autoridad no debería tener esta competencia puesto que tiene un claro conflicto de intereses. En su lugar, como todo otro delito, las poblaciones debieran poder tener el derecho de presentar su denuncia sin esta intervención aberrante del MEM.

  1. En el caso de poblaciones que hayan sido afectadas por contaminación minera, sería preciso desarrollar los mecanismos jurídicos que permitan que la comunidad pueda contar con la posibilidad de designar a los supervisores independientes que acompañarán la realización de los estudios correspondientes. sería en virtud de dar transparencia a los estudios, ganar credibilidad y legitimidad.

  1. Finalmente, habría que considerar cuáles serían los mecanismos para el financiamiento de la implementación de estos nuevos mecanismos de gestión de la salud ambiental en zonas donde se realizan actividades mineras.



LA SERVIDUMBRE MINERA, LA LEGALIZACIÓN DEL SAQUEO

Más de 20 lagunas y bofedales en peligro en Comunidad El Tingo


La Ley de Servidumbre minera no es más que el desalojo formal o legalizar el saqueo de nuestros recursos naturales contra la voluntad de humildes campesinos que no quieren cambiar sus costumbres y tradiciones de agrícola y forestal por la destructora y contaminadora minería irresponsable, razones sobran para los campesinos de la Comunidad El Tingo para oponerse viendo los ejemplos de Minera Yanacocha que desapareció cerros completos como “San José”, Maqui Maqui”, “La Quinua”, “Negro”, entre otros; así como las lagunas “San José”, “Yanacocha” y cuantiosos manantiales dejando sin agua a ríos y quebradas que abastecían a las comunidades adyacentes que ahora realizan marchas y protestas reclamando casi todos los días.

Después de 12 años de emitidas las leyes entreguistas del ahora preso ex presidente Alberto Fujimori específicamente la Ley Nº 26570 que modificó el artículo 7 de la Ley Nº 26505, para permitir alternativamente el establecimiento de una servidumbre minera sobre el predio la misma que está en vigencia desde enero de 1996 promulgado por el gobierno del hoy sentenciado Alberto Fujimori en Cajamarca por primera se aplicaría el saqueo a través de la modalidad de Servidumbre minera, afectando la cantidad y calidad de las aguas.

ANTECEDENTES

La comunidad Campesina El Tingo fue creada el 09 de octubre de 1956 a través de Resolución Sumprema Nº 061 e inscrita en los Registro Públicos el 11 de marzo de 1980 con el Titulo 1569/80. Por lo tanto sus tierras no pueden ser vendidas ni alquiladas a terceros menos aún para explotación minera sin el consentimiento de los dos tercios de comuneros calificados, según los propios estatutos de la comunidad.

Sin embargo la empresa Minera Coimolache que es de propiedad del grupo empresarial Buenaventura también socio de Yanacocha que opera en Cajamarca viene haciendo trabajos aproximadamente desde 1987 en las zonas de Hualgayoc y Chugur, desde el 2005 anunciaron la ejecución del proyecto Tantahuatay ubicado en territorio de la comunidad campesina el Tingo. El objetivo es iniciar una operación minera para explotación de oro principalmente.

En la actualidad varios comuneros y posesionarios de tierras de la Comunidad Campesina el Tingo ubicada en la provincia de Hualgayoc- Cajamarca, serán despojados y expulsados de sus tierras en los próximos meses; debido a que la CIA MINERA COIMOLACHE S.A. habría iniciado el proceso de “Servidumbre Minera” que no es más que un proceso igual a la expropiación, por ende se verían afectadas la cantidad de aguas de dicha cuenca pues en el mencionado sector existen más de 20 lagunas y bofedales principales afluentes de las cuenca Tingo Maygasbamba que abastece a más de 40 caseríos y 38 canales de riego en Bambamarca, caseríos como: Pilancones, Apan Alto, Apan Bajo, Palo Blanco, Frutillo, El Cumbe San José, El Cumbe Chontabamba, la Lucma, entre otros; sin embargo en forma desvergonzada y desconociendo la realidad los funcionarios de la citada minera señalan que la zona es ariaza y sin producción agropecuaria.

Ante tales afirmaciones los comuneros invitaron a un grupo de periodista independientes el pasado 07 de abril para realizar un recorrido por la zona llegando primero al lugar denominado “Hueco Grande abajo de la laguna Viera Vira, allí se constató la presencia de abundante agua bofedales por todas partes donde nace el río “Las Aguilas” y la quebrada “Yerba Buena”, también se verficó en la zona las lagunas “EL Volcán” “La Misha I, II, II, IV,” “Las Chatas” y “Sola”, entre otras; mientras que por otro lado se constató las lagunas “Los Gentiles”, “Quiwilas”, “Pampa Grande”, “Tres Amigos”, “Media Luna”, y “Minas Conga”, entre otras.

Además, para orgullo de los tingueros llegamos hasta las propias hidroeléctricas familiares que cuentan algunos comuneros, como se sabe éstas funcionan a base de agua para mover las turbinas una muestra más que existe abundante agua en dicha zona.

Ahora que tanto se pregona campañas para contrarestar el calentamiento global, creemos que es tiempo de cuidar éstas fuentes naturales de agua y el gobierno de turno tanto local como regional y nacional son los llamados a protegerlos.


Maleteando

PREQUEÑOS VENDEPATRIA

No solo el gobierno aprista está empeñado en regalar a las trasnacionales los bosques y cerros de nuestro querido Perú, ahora resulta que un grupo de asalariados de las empresas mineras escudados en la Asociación Cívica para el Empleo y Desarrollo de Hualgayoc, están circulando una nota pidiendo que las tierras de la comunidad Indígena “El Tingo” se reviertan al estado para que éste lo entregue a las empresas mineras para el saqueo.

A éstos pequeños entreguistas no les importa el futuro de sus hijos, nietos y otras generaciones, no saben que en el Tingo nace la fuente de vida es decir las aguas para Bambamarca, o acaso cuando no haya agua ni producción agrícola comerán el dinero y el trabajo que ahora buscan?.

¿Y LA RESPONSABILIDAD SOCIAL?
En una evaluación
solicitada por el Comité de Responsabilidad Social y Ambiental de la Junta Directiva de Newmont, evaluaron a Yanacocha desde arriba porque no se han creído el cuento de sus balances sociales. No es una evaluación solicitad por la propia Yanacocha sino por los verdaderos dueños desde Estados Unidos.
Durante la evaluación se encuestó a 500 personas del entorno de la mina quines piensan que la corrupción es uno de los problemas que mas preocupan a los ciudadanos.
Según la evaluación Yanacocha tiene poca comunicación con las comunidades locales. Pág. 10 Quiere decir que MY Radio y toda su prensa no le ha servido para comunicar. Los gerentes de comunicaciones son unos incapaces entonces?
Los mineros arrogantes tratan a los campesinos con nombres de desprecio "Indios", "cholos" (pág. 10).
Recoge quejas de campesinos que dicen que los empleados de Yanacocha ni siquiera bajan de sus carros para hablar" (Pag. 10)
Los mineros alardean de su situación económica (Pag. 10)
Cuando la gente se queja a la mina por los maltratos y el desprecio los empleados de Yanacocha responden con una actitud defensiva en vez de llamar a sus trabajadores para que cambien su comportamiento. (Pag. 10: Necesitan entonces curso de buenos modales?).
Los lideres de Combayo como el alcalde usaron el conflicto para beneficios personales.
En relación a los autores de la muerte de Isidro Llanos en 2006 dice: que la policía actúo de su propia mano y" en cumplimiento de su deber" (¿deber de matar?)
Evalúa el control ilegal de las actividades de GRUFIDES y el Padre Marco Arana.
Dice: "algunos entrevistados se negaron a darnos sus nombres por temor a represalias de Yanacocha. Es posible que éstas sean las señales iniciales de "una cultura del miedo y la sospecha. Osea Yanacocha infunde miedo y terror a la población.

LAS PRINCIPALES INQUIETUDES:
1. Cantidad y calidad del Agua.
2. Existe gran incertidumbre por la muerte de animales.
3. Solo tres% de las 500 personas encuestadas no creen que Yanacocha este preocupada por la calidad del agua (Pag 16)
4. En la campaña del agua, nadie les cree y ha aumentado la percepción de que Yanacocha manipula a las instituciones del gobierno, regalándoles cosas.
5. Las COMOCAS no son eficaces por que la mina les paga a los participantes y estos no tienen capacitación y no se cree en sus resultados (pág 14)
6. La práctica de la compañía que afirma que no contamina el agua no es creíble para la población. (Pág. 18)
7. El no cumplimiento de las promesas a las comunidades ha generado desconfiaza (pág 26)
8. Los mineros parecen avergonzados de trabajar en minería (pág. 21)
9. Aunque los empleados llevan en su fotocheck la declaración de principios para respetar a las comunidades, parecen no entender lo que esta allí escrito (pag 21)



1 comentario:

Unknown dijo...

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